Sinopsis:
Un hombre parado ante un semáforo en rojo se queda
ciego súbitamente. Es el primer caso de una «ceguera blanca» que se expande de
manera fulminante. Internados en cuarentena o perdidos en la ciudad, los ciegos
tendrán que enfrentarse con lo que existe de más primitivo en la naturaleza
humana: la voluntad de sobrevivir a cualquier precio.
Ensayo sobre la ceguera es la ficción de un autor
que nos alerta sobre «la responsabilidad de tener ojos cuando otros los
perdieron». José Saramago traza en este libro una imagen aterradora —y
conmovedora— de los tiempos sombríos que estamos viviendo, a la vera de un
nuevo milenio. En un mundo así, ¿cabrá alguna esperanza? El lector conocerá una
experiencia imaginativa única. En un punto donde se cruzan literatura y
sabiduría, José Saramago nos obliga a parar, cerrar los ojos y ver.
Recuperar la lucidez y rescatar el afecto son dos
propuestas fundamentales de una novela que es, también, una reflexión sobre la
ética del amor y la solidaridad. «Hay en nosotros una cosa que no tiene nombre,
esa cosa es lo que somos», declara uno de los personajes. Dicho con otras
palabras: tal vez el deseo más profundo del ser humano sea poder darse a sí
mismo, un día, el nombre que le falta.
Crítica: Como buen libro famoso... esperaba más
Da un poquito
de vértigo ser crítico con lo que la opinión general define como una de las
obras maestras de un genio de la literatura y Premio Nobel... Pero quizás una
de las cosas buenas de hacerse mayor es que uno se va haciendo más inmune a lo
que piensen los demás, así que aquí va una opinión discordante.
El libro no me
ha parecido ni mucho menos para tanto. Para empezar, no me ha parecido original:
la idea de que el hombre pueda perder todo rasgo de humanidad en situaciones
extremas la hemos visto plasmada con anterioridad en decenas de otros libros o
películas que presenten escenarios post-apocalípticos o similares. Nada nuevo
bajo el sol, así que, para empezar, el "meollo" del libro me ha
dejado algo frío. Sería interesante si hubiera sido pionero con la idea o la
forma de plasmarla, pero me ha parecido que no es así.
Por otro lado,
aunque ya sé que no es muy relevante, me han resultado muy poco creíbles
multitud de situaciones... la exageradísima actitud de los militares, por
ejemplo (sí, ya sé que probablemente el autor ha querido exagerarlo aposta,
pero no creo que hiciera falta, y cae en lo estrambótico, desde mi punto de
vista) o detalles absurdos como que en una epidemia así las autoridades no
utilicen medios de protección (¿militares sin trajes de protección
antibiológica?). Detalles tontos si queréis, pero que me han resultado
fastidiosos.
Y el estilo...
en fin... Molesto. Muy molesto. Carencia de puntos, diálogos
encadenados sin diferenciación de quién habla, etc. Muy molesto, y no veo que
aporte absolutamente nada positivo. Otros autores que han usado técnicas
"originales" como la carencia de puntos en los textos o similares, lo
han hecho para conseguir un efecto determinado (sensación de conversación
compulsiva, o de urgencia, o de un modo de hablar determinado...), es decir,
otros han usado estilos no convencionales consiguiendo transmitir algo con
ello. Pero con este estilo, a mí Saramago sólo me ha transmitido fastidio.
En fin, no
digo que me haya parecido mal libro... pero ni mucho menos la obra maestra que
esperaba encontrar, dada su fama. Será que soy yo el rarito...
Nota personal:
5,5
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