Sinopsis:
Berlín, 1922. Reina la confusión en la capital
alemana tras la victoria aliada. Recorren las calles, con banderas rojas, las
víctimas de la más impresionante inflación de todos los tiempos. Y, tras ellos,
las bandas incontroladas de ex-combatientes nacionalistas, que siguen las
consignas de un oscuro militar austríaco, Adolf Hitler. Indiferentes al barullo
callejero, conservan aún sus privilegios unas pocas familias aristocráticas, en
su mayoría judíos, de gran tradición en el mundo de las finanzas.
En este escenario irrumpen el americano Peter Ellis
y el alemán Christoph. Peter vive una doble vida: frecuenta, por un lado, los
elegantes salones de nobles y banqueros y, por otro, los tugurios bohemios de
los artistas. Para su desgracia, se enamora de la hija de la familia Waldstein,
a la vez que se ve involucrado sin querer en un asesinato político, que
presagia ya los horrores del Tercer Reich. Poco a poco, todos se ven
arrastrados en el torbellino de desatinos que sacude a Alemania y que la
prepara para la dictadura nacionalsocialista.
Crítica: Rozando la obra maestra
Sobre el
régimen nazi y la Segunda Guerra Mundial se ha escrito muchísimo, pero muy poco
sobre los años de entreguerras en Alemania, unos años turbulentos que pusieron
las bases para el ascenso al poder del nacionalsocialismo, y todo lo que vino
después. Este libro va precisamente de eso.
Aunque
transcurre durante los años 20, en la novela se repasan los turbulentos
acontecimientos que tuvieron lugar en Alemania desde los últimos años de la
Primera Guerra Mundial. Años de revolución, de alzamiento obrero y
aplastamiento brutal por milicias del ejército descontroladas; años de profunda
opresión económica por parte de las potencias vencedoras, dando lugar a una
gravísima crisis económica, con una inflación absolutamente disparatada, con la
que unos pocos se lucraron mientras la mayor parte del pueblo caía en la
pobreza y el hambre; años de profundo paro, desesperanza e indignación popular
que derivaron hacia posiciones extremistas, con los resultados finales que
todos conocemos.
Pero éste
no es un libro de historia, aunque la mayoría aprenderemos más con él que con
cualquier ensayo al uso. Se trata de una interesante y bien escrita novela en
la que iremos descubriendo todos estos apasionantes hechos históricos de la
mano de Peter Ellis, un norteamericano bohemio que, recién llegado a Alemania
con unos pocos dólares en el bolsillo, se ve introducido de repente en los
círculos aristocráticos (venidos a menos por la crisis) y prácticamente
convertido en potentado gracias a la fortaleza de esos pocos dólares frente a
un marco que ya no vale ni el papel en el que está impreso.
Peter Ellis
vivirá en Berlín inmerso en dos ambientes: el aristocrático que ya hemos
comentado, y el de las clases más pobres, que conoce de la mano del que se
convertirá en su profesor de pintura. Unos y otros le irán haciendo entender el
pasado reciente y el presente de esa Alemania convulsa, a través de amenas
conversaciones en las que iremos empapándonos de este periodo histórico con una
gran amenidad.
Estos
personajes ficticios del libro se moverán en distintos ambientes que permitirán
que afloren a las páginas de la novela personajes secundarios reales como
Bertol Brecht, Göring, o un gran número de políticos de la república de Weimar
hoy ya olvidados. En medio de todo ello, conspiraciones, asesinatos, amor y
sexo, y el lento afloramiento del latente odio a los judíos.
La trama y
el interesante marco histórico están tratados por Solmssen con maestría,
consiguiendo lo que decía, describir magistralmente una época compleja y
convulsa de forma extraordinariamente amena, y con un estilo singular que
mantiene al lector pegado al texto sin necesidad de grandes golpes de efecto.
El autor utiliza con éxito la técnica del cambio de escenas y la introducción
de conversaciones ya iniciadas, una técnica que si bien a ratos descoloca un
poco al lector, que debe emplear unos segundos en “resituar” su mente durante
la lectura, ofrece a la obra un dinamismo peculiar.
Por último,
el final es, para mí, sencillamente brillante. Quizás lo mejor de la novela,
uno de esos finales (un final amplio, alargado durante un par de capítulos) que
consiguen elevar subjetivamente en el lector el nivel de todo lo leído. Es
decir, es una de esas novelas que, si bien durante su transcurso lees con
interés y agrado, cuando la cierras lo haces pensando “¡qué novelón!”, gracias,
sobre todo, a esa parte final. Brillante.
La obra de
Arthur Solmssen es corta y, por lo que he leído por ahí, irregular, pero yo me
atrevería a decir que “Una princesa en Berlín” es uno de esos libros que rozan
la obra maestra. Puede que no guste a todo el mundo (aunque si uno mira las
opiniones que circulan por internet, sí parece que gusta a casi todos), pero
desde luego a mí me ha parecido muy bueno. Por otro lado, es uno de esos libros
con tanta profundidad, con tanta “miga” semioculta bajo una falsa apariencia de
sencillez, que probablemente será uno de los pocos libros que algún día
releeré.
Nota personal: 8,5
También a mi me pareció un libro interesante por muchos motivos. Destaco entre ellos la descripción de la hiperinflación y cómo se convirtió en una de las raices de la reacción que llevó a Hitler al poder. Buena descripción de la psicología nacional alemana, muy buena elección de un período de la historia que merecería mas libros sobre ella. Comparto con el autor del post el interés por ese segmento de la historia alemana y por ende europea mucho menos frecuentado que los hechos desarrollados a partir de 1933 que son consecuencia de ellos. Después de leida, efectivamente, se queda uno con deseos de más. Esperemos que la iniciativa de Solmsen produzca nuevos frutos.
ResponderEliminarRomán (http://appelantur.blogspot.com)
Las casualidades se dan, he llegado hasta tu blog queriendo leer alguna opinión sobre "una princesa en Berlin" y como a ti, me parece una novela extraordinaria, uno de mis libros favoritos, que me encantaría que llegara a ser el guión de una película y tengo un blog que se llama exactamente "Cosas mias" pero no es un blog sobre literatura, es de temática variada son eso "cosas mias". Gracias por tus aportaciones.
ResponderEliminarEstoy en desacuerdo. La novela queda ahogada por el contexto histórico. La falta de encarnadura de los personajes y su débil integración en aquél debilita la estructura de la fricción.
ResponderEliminarPor favor...
EliminarAprenda primero qué es una "historia novelada"
Después seguiremos hablando
No ha entendido usted NADA
Personajes sin vida, sin pulso narrativo, abundantes detalles sin interés, ausencia de verdadero estilo...Para pasar el rato y poco más, a pesar del interés del contexto histórico. Justo al final parece querer remontar, pero ya es tarde
ResponderEliminarES DECIR: UNA OBRA MAESTRA
ResponderEliminarMadre mía, es lo que tiene de pasar desde nimiedades a una obra escrita hecha con una gran investigación
Y, lo penoso, es que no les da vergüenza comentar